En el proceso legal de 1886, Meucci tuvo que lidiar, incluso contra sus propios abogados, presionados por el poderoso Bell, pero Meucci supo hacer entender al juez que no cabía duda en cuanto a la autoría del invento registrado. A pesar de la declaración pública del entonces Secretario de Estado: “existen suficientes pruebas para dar prioridad a Meucci en la invención del teléfono". A pesar de que el gobierno de Estados Unidos inició acciones legales por fraude contra la patente de Bell, el proceso fue embarrancado en el arenal de los recursos por los abogados de Bell, hasta cerrarse a la muerte de Meucci en 1889.
Meucci falleció pobre y amargado y jamás vio la gloria y el reconocimiento de su talento, el cual chocó con su escaso conocimiento del inglés y su poca desenvoltura ante las artimañas legales y los ingentes intereses económicos de las grandes corporaciones de Estados Unidos.
POR JORGE VELAZCO!
Como ya sabemos, el teléfono ha sido un gran invento que se ha vuelto una herramienta indispensable para la gran mayoría de los seres humanos, ya que facilita la comunicación entre distancias grandes en un tiempo corto, teniendo un impacto de nivel social muy importante para la humanidad, transformando la manera de comunicarnos con otras personas.
ResponderBorrarLorena Sánchez Sandre. 601